El lema de Enrique Morente era “traicionar la tradición con una nueva traducción”. Esto mismo es lo que hacen Los Planetas y El Niño de Elche con su proyecto Fuerza nueva (aquí la minúscula es importante para diferenciarse del partido español de extrema derecha de los años setenta), proyecto con el cual parecen tomar la estafeta que trajera primero Camarón, después Morente y ahora esta banda granadina especialista en hacer himnos, en colaboración con Paco Contreras, el cantaor y poeta nacido en Elche, experto en subvertir la ortodoxia del flamenco.
«La cruz es» su más reciente sencillo, lanzado muy oportunamente días antes de este Viernes Santo. ¿Por qué oportuno? Porque se trata de una saeta, un canto religioso tradicional de España, que como diría el poeta Antonio Machado, se trata de “cancioncillas que tienen como objeto traer a la memoria del pueblo, en los días de Jueves y Viernes Santo, pasajes de la pasión y muerte de Jesucristo”.
Pero la traición a la tradición viene desde mucho antes de este tema de «La cruz». En el poema de Machado “La Saeta”, aparecen los versos “¿Quién me presta una escalera para subir al madero, para quitarle los clavos a Jesús El Nazareno?”. El poema fue musicalizado y popularizado por Joan Manuel Serrat en su canción del mismo nombre. Sin embargo, lo irónico es que se convirtiera en un himno oficioso cantado por grupos religiosos en las festividades seculares de la Semana Santa andaluza cuando en origen se trataba de un poema en contra de esta festividad y las imágenes torturadas que se mostraban.
Respecto al cómo nace «La cruz» de Fuerza nueva hay una anécdota que cuenta el artista Pedro G. Romero: La banda escuchaba dentro un coche el disco Sign of the times de Prince mientras buscaban dónde estacionarse. Con las ventanillas abajo, escucharon el ensayo de una banda tradicional que se preparaba para la Semana Santa. De pronto, en una de esas coincidencias mágicas del destino, las notas de “The Cross”, un tema del disco, se comenzaron a mezclar con los sonidos de las marchas que ensayaba la banda de cornetas y tambores. Con la atención puesta en esta coincidencia, decidieron bajar del auto y buscar al grupo de músicos. Cuando los encontraron, coincidió con el inicio de la marcha “La Saeta” y entonces, todos a una sola voz la cantaron mezclándola con el estribillo de “The Cross” de Prince.
Esto lo llevan al estudio y se convierte en el tercer lanzamiento de un disco que parece ser todo un repaso por las fiestas populares españolas para traducir la tradición y traicionarla, no en el sentido negativo, sino en el de una re-lectura. Al escucharla, es imposible no pensar en un The Cure o en un Cocteau Twins flamencos. Pero incluso es más difícil pensar que todo eso tiene su origen en Prince. Es decir, nadie podría asociar al músico norteamericano con un canto religioso andaluz ni se imaginaría esta mezcla. Pero Los Planetas y El Niño de Elche lo hacen de manera magistral entendiendo que la música está toda conectada entre sí y lanzan ni más ni menos que una cruz entre Machado y Prince: la unión de la fuerza de la palabra y la música para crear una saeta indie que pueda ser cantada este Viernes Santo.