The Ranger, ojeras, mucha sangre y punk rock
Si ustedes son como yo y le temen a quedarse en carretera, siempre alucinan con masacres absurdas en medio de pueblos fantasmas, esta película les va a gustar un chingo y alimentará esos traumas.
Si ustedes son como yo y le temen a quedarse en carretera, siempre alucinan con masacres absurdas en medio de pueblos fantasmas, esta película les va a gustar un chingo y alimentará esos traumas.
El famoso director Peter Jackson debutó en el cine en el género gore, entregándonos una obra maravillosa, Bad Taste (1987), donde el desborde de ingenio, agudeza y creatividad sin ningún prejuicio buscó joder los moldes para hacer una cinta realmente atrevida.
Joaquín Segura es un dude fanático del cine gore que, en colaboración con Eduardo Smeke, por allá de 2004 tomó una historia culerísima –pero real– ocurrida en la Ciudad de México y la hizo un cortometraje sangriento muy divertido.
Un pueblo en Kansas es sorprendido por la repentina caída de una nave espacial con casi una decena de peludos personajes que recién escaparon de una prisión de alta seguridad de una galaxia cercana.
Si ustedes la vieron allá por los años noventa pero eran unos niños llorones que corrían cuando se paraba frente a ustedes un payaso, deberían darle una oportunidad más.
Piranha no fue más que un producto nacido de los fetiches de Joe Dante, un fanático confeso de los cómics, la televisión y el cine de serie B. Mucha agua mezclada con sangre y bikinis: el combo ganador de aquellos años.