La banda de reggae capitalino, Los Rastrillos, se encuentra celebrando sus 30 años de trayectoria. Surgidos en el oriente de la Ciudad de México, en 1989, decidieron apostarle a los sonidos prehispánicos, el son jarocho y demás géneros que hicieron único su sonido. Ahora con seis álbumes y múltiples giras, Los Rastrillos sigue dando de qué hablar, creando nuevos caminos.
Dentro de su festejo conmemorativo, Los Rastrillos editó un disco nuevo: Rastrillos 30 años Vol. 1, el cual incluye 10 canciones cruciales en su historia. Esta es la primera parte de un compilado de tres volúmenes que reflejan el antes y después de la agrupación. Es un recorrido por las tres décadas de los pioneros del reggae mexicano. Conversamos con Gerardo “Zopi” Pimentel para darnos más detalles al respecto.
Siendo un referente para el reggae mexicano, ¿qué representa para la agrupación cumplir 30 años?
30 años habla de que consolidamos una familia, buenos amigos, el que nos ha mantenido unidos la música; y por supuesto el canal de comunicarnos que fue la música, a través del reggae. En realidad el reggae fue en lo que empezamos, pero son múltiples géneros. Y nos habla también de que en estos 30 años, hemos hecho un trabajo en el que hemos creído, un camino que nos ha mantenido juntos y de alguna manera crearnos una identidad a través de la música.
El apostarle a los sonidos de fusión, ¿qué tanto les ha funcionado?
Era un camino obligado. Es decir, partimos de que el reggae es la música que nos motiva, por su mística y todo lo que hay detrás. Entendiendo que el reggae no es un género puro, nuestro sonido fue de algo que se derivó de su entorno y de su parte multicultural. Nosotros en un principio decidimos hacerlo así, y lo reinterpretamos. Esas fusiones eran necesarias porque los integrantes que conforman a la banda tenían diversas inquietudes musicales y fueron aportando la música tradicional como el mismo son jarocho, la salsa, música que nos gusta. Eso ha permitido salir de nuestro propio estilo.
Están presentando un nuevo material, Rastrillos Vol. 1, ¿representaría una nueva faceta para Los Rastrillos?
Este disco en realidad es una celebración por 30 años. Cuando decidimos hacer esto era pensando en hacer un recorrido musical de todas las épocas de Los Rastrillos y por eso pensamos lanzar este disco con tres volúmenes de diez canciones cada uno. Es una especie de compartir al público canciones clásicas, de canciones que, si bien ya no las tocamos cono hace veinte años, hicimos nuevas versiones, con agregados y nuevos arreglos.
¿Qué se viene para la presentación del disco? Bien amerita una fiesta.
Desde que comenzó el año nos fuimos preparando por estos 30 años, tendremos invitados especiales como Iraida Noriega; en este caso para la celebración en el Centro Cultural de España se hará una la presentación oficial del disco y les daremos una probadita más de otros temas. Iraida también formara parte de las colaboraciones del Vol 2. ¡Será una velada muy sabrosa!.
¿Qué ha hecho que Los Rastrillos haya heredado esta historia del reggae mexicano, durante tantos años?
Lo primero, creo, es que nuestra música fue curándonos, en principio fue eso, que funcionaran las canciones para nosotros, que la cultura misma y la música nos fuera transformando. Fue curar, este proceso nos vino bien y la gente compaginó muy bien con ellos. Además del goce, es lo que ha cobrado sentido en todo este trabajo. Hemos buscado también el sentido social, de que la música también podría aportar algo a nuestro entorno, al barrio o a la comunidad. Eso le da sentido a muchas cosas. Y el cariño de la gente que ha estado presente. El reggae encuentra tus orígenes. Hemos encontrado nuestra veta, nuestro sonido. Y reivindicarnos.
Tres décadas, dice mucho, ¿qué les falta por hacer?
Tres décadas, cuando volteas, es una vida. Sin duda nos hacen falta cosas por hacer, las cosas cambian. El mantener una banda no es sencillo, pero ese es el reto. Seguir aprendiendo desde lo humano y lo colectivo. A veces, es complicado tener un proyecto. Nos da gusto hacer música nueva, hacer otros discos, el aprender de nuevas generaciones. A nosotros nos tocó picar piedra y abrir brecha.
En 2013, editaron su último disco Luces, ¿qué ha pasado desde entonces?
Luces fue nuestro último disco, que salió en un momento en el país de mucha violencia, que todavía padecemos. Uno de los integrantes desapareció. Habla de esa descomposición social. Tuvo buena aceptación del público, y salió de manera independiente, como ha sido desde entonces. Es involucrarse en la producción y en la grabación. Los Rastrillos no es regular que saque discos constantemente, pese a los años que llevamos como banda, pero así estamos a gusto. Estos 30 años de trabajo han sido satisfactorios. Habernos presentado en el Cervantino y en los 20 años del Vive Latino, el haber compartido con una gran banda veracruzana, Los Aguas Aguas, fueron algunos de los momentos para celebrarlo. Estos 30 años para Los Rastrillos, apenas comienzan.