Naufrago cuando recuerdo las palabras de una mujer, o aquí estoy como un cactus sediento que nació en los sillares de un derrumbe
La poesía de Guillermo Meléndez es una mirada que desvanece todo lo que ante ella se cruza, todo lo que abarca. Es un espejismo optimista de la urbe, configuración verbal que recrimina y al mismo tiempo dibuja el ideograma del despecho.