carlos rené padilla

Detectives literarios: Los crímenes de Juan Justino y Rodrigo Cobra

Carlos René Padilla, plantea en este ensayo los orígenes del género negro en Sonora. A través de un relato policiaco debe resolver cuál fue la primera novela en el estado: Juan Justino Judicial de Gerardo Cornejo, o La madriguera de los Cobra de Alonso Vidal.

Se dice que hay un boom de la novela negra en nuestro país, lo cierto es que todavía no hay el alcance y variedad que existe en otros países, ya no digamos Estados Unidos, Inglaterra o Francia, sino España o Argentina. Sin embargo, poco a poco ha comenzado a publicarse libros de ensayo que intentan reflexionar lo que está sucediendo en México y no solo tesis dirigidas a presentarse frente a los sinodales para luego perderse en los archivos de las universidades.

En el 2012, Juan Sasturain, escritor argentino flamante ganador del premio Hammet de la Semana Negra de Gijón en 2019 y director Biblioteca Nacional Mariano Moreno de su país, tenía un programa de televisión en la señal pública, que se llamaba Disparos en la biblioteca. Ahí encarnaba a un “detective literario” que investigaba casos sobre escritores negro/criminales, cuña que uilizaba para hablar sobre la literatura argentina del género.

Carlos René Padilla, siempre disruptivo y jocoso, hace algo similar en su ensayo, ganador del libro Sonorense, para hablarnos de dos libros nodales en la literatura del noroeste: Juan Justino Judicial de Gerardo Cornejo y La madriguera de los Cobra de Alonso Vidal, recurre a un relato policiaco en el que un detective, apodado El Negro, debe resolver cuál de los dos títulos mencionados debe considerarse la primera novela negra escrita en Sonora. Por si el encargo fuera poco, además, deberá resolver el asesinato de un padrecito.

Padilla deja atrás la forma en que escribía en sus primeros textos, para hacer una narrativa más fluida, eso sí llena de humor, cosa que no entra en conflicto con la seriedad con la que se toma el encargo. De esta manera, crea una suerte de personaje colectivo, Los Tres Reyes Magos, que le ayudarán resolver el entuerto de cuál de las dos debe llevar el epíteto de ser la primera.

A manera de híbrido narrativo-ensayístico Padilla hace un recorrido para adentrarnos primero en lo que significa la novela policiaca, su origen, algunas de sus ramificaciones, para después, y creo que esto es lo que más destaco del libro, centrarse en la literatura sonorense, en especial estas dos novelas que han tenido poca resonancia fuera del ámbito académico o del lector especializado.

El personaje colectivo, (obsesos de las coyotas, traficantes de pan dulce al interior del Samborns, bebedores del Pluma blanca), hace un análisis bastante interesante sobre Juan Justino Judicial de Gerardo Cornejo, explicándonos parte de la trayectoria de Cornejo, sus obsesiones y su conocimiento de la parte rural de Sonora. Es interesante también como Padilla, a través de sus personajes, rebaten al hasta este momento incuestionable Vicente Francisco Torres y su seminal Muertos de papel

Posteriormente se aboca a desmenuzar La madriguera de los Cobra de Alonso Vidal, la única novela del poeta sonorense. Su análisis también aporta diversos datos sobre el autor, sobre la sociedad sonorense y sobre la justicia en nuestro país. Así, gracias a este híbrido literario, nos ofrece una mirada incisiva a diversos tópicos del noroeste: el machismo, la figura del judicial como forma de movilidiad social, el arraigo a la tierra, la homofobia y la gran calidad de escritores sonorenses que han existido.

Al mismo tiempo, el detective cliché de Padilla resuelve un caso que va en paralelo con lo descrito. Sólo el necio no entenderá que el esquemático desarrollo de la historia es debido a que demuestra en la práctica lo que va describiendo. Curiosamente, ambas novelas se saltan las convenciones del género, por lo que dilucidar cuál es la primera de su tipo es verdaderamente un reto. Quién es el ganador entre Cornejo y Vidal, no lo voy decir aquí, ustedes deberán leer el libro de Padilla para conocer las conclusiones.


Carlos René Padilla
Los crímenes de Juan Justino y Rodrigo Cobra
Nitro/Press, 2019.